COROLARIOS ATERRADORES
En vista de su actualidad y pertinencia en la búsqueda de salidas al caos programado, agrego otro de mis artículos publicado en el mismo medio, cuya agudeza y tino sobresalen en sus contenidos, temas y fuentes, de modo que es meritorio ser publicado en él.
Lo aprecio, sobre todo porque esos artículos continúan vigentes y conservan capacidad de convocatoria, según lo puede constatar quien los lea a la luz de la actualidad, que no es tan confusa como nos quieren hacer creer quienes promueven el Apocalipsis predicho por los herederos del tal Abraham, primer estafador histórico de los palestinos y de quien Benjamin Netanyahu se considera su actual reencarnación sionista.
Cristianos y musulmanes hacen parte del mismo plan apocalíptico que, aunque reacios a la guerra, según afirman, lleva a Kiril y Francisco, en la declaración de marras, a incitar a los jóvenes cristianos, así: "No tengáis miedo de ir contra corriente, defendiendo la verdad de Dios, a la cual las actuales normas seculares distan de conformarse siempre."
¿Hemos de esperar un ISIS cristiano? ¿Acaso los fracasados usanos arrogantes, fanáticos, asustados, miopes, ambicioso, políticamente atrasados e ilusos decepcionados pero iusionados por Donald Trump, se sumarán a la pata cristiana interesada en precipitar el Juicio Final por los tres mitos abrahámicos soñado y predicho con milenios de anticipación?
Para no pecar de ingenuos y seguir llevados como reses al matadero, cae como anillo al dedo una cita extensa de mi apreciado y recordado "Dictum de Acton" o "Axioma de lord Acton", que tanto me esmero en recordar frente a cualquiera que se considere con derecho a ejercer algún poder sobre alguien.
Tales atarvanes sin escrúpulos proceden abusando de la amnesia impuesta a las mayorías por los medios de alienación masiva que controlan, presumiendo de una supuesta y siempre falsa superioridad moral que los haría casi incorruptibles, si les creemos y no aprendemos de este mar de corrupción, ya evidente para todos, en todos los países y en instituciones públicas y privadas de todo tipo.
Copiemos de wikipedia:
"... Lord Acton remitió una carta al obispo Mandell Creighton, autor de una monumental Historia del Papado, que no era contundente al juzgar la conducta de algunos papas. A esto Acton replicó:
"No puedo aceptar su doctrina de que no debemos juzgar al Papa o al Rey como al resto de los hombres con la presunción favorable de que no hicieron ningún mal.
Si hay alguna presunción es contra los ostentadores del poder, incrementándose a medida que lo hace el poder.
La responsabilidad histórica tiene que completarse con la búsqueda de la responsabilidad legal. Todo poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe absolutamente.
Los grandes hombres son casi siempre hombres malos, incluso cuando ejercen influencia y no autoridad: más aún cuando sancionan la tendencia o la certeza de la corrupción con la autoridad." [subrayas agregadas por DBP]
¿Hay derecho a seguir esperando redentores que no han de faltar jamás, mientras haya ingenuos que coman cuento, pues primero se acaba el helecho que los marranos?
¿O tenemos la obligación de asumir nuestra ciudadanía sin candideces, superando la inocencia aunque sin corrompernos como los sicópatas, para liberarnos nosotros mismos de las cadenas que nos han impuesto esos desalmados despreciables durante diez mil años de Historia?
Decidirlo está en tus manos, y en las de siete mil millones más.
¿Será que nos gana y apabulla, como hasta ahora en la moribunda Historia, el 1% conformado por pervertidos despiadados, mentirosos compulsivos, genocidas congénitos, repugnantes ambiciosos sin escrúpulos y enceguecidos de soberbia, como Donald Trump, quien reemplaza el infame bigote de Hitler con su absurda cabellera rubia?
Su pinta contribuye a convocar fanáticos descerebrados, enfurecidos porque sus valores aristocráticos, excluyentes, prejuiciosos, retrógrados, discriminatorios, intolerantes y violentos están en crisis ante el avance en el reconocimiento de los Derechos Humanos y la dignidad de todas las personas, exigido cada vez por más gente, de modo que los gobernantes se están viendo obligados a ceder en su soberbia admitiendo las decisiones del pueblo, que cada vez ve y sabe más y los tolera menos.
No obstante, se trata de algo inaceptable para los sicópatas y neuróticos megalómanos que se sienten mejores que las mayorías, con derecho a utilizarlas y desecharlas, como hacen los miembros del gobierno en USA con los marines, convertidos en asesinos para proteger los intereses de los enemigos comunes, que los abandonan a su azarosa suerte cuando ya son veteranos de guerra llenos de cicatrices físicas y mentales, y con complejas heridas sicológicas abiertas.
Esta superioridad -que crecientemente y con pocas excepciones, les niegan los que tratan como a inferiores genéticos, raciales o culturales- los autorizaría a pisotearlos, como hace Trump con mexicanos y musulmanes. Pero éstos cada vez están menos dispuestos a rendirles pleitesía a los blancos protestantes anglosajones y demás sicópatas al mando. Se sienten gente digna, capaz de defender sus derechos, que les han negado durante siglos.
Sin embargo, aunque Trump es una notable lacra plutocrática, se queda corta en sus ruindades, según opinan los más canallas de los enemigos comunes que dirigen la "Continuity of Government" y hacen del presidente de USA un títere desde los tiempos de Dwight David Eisenhower, por lo menos, aunque puede ser desde mucho antes porque antecesores suyos ya habían denunciado esa condición.
De todos modos, es un hecho evidente, como lo demuestra Oxfam, la concentración de riqueza en unos cuantos plutócratas: "62 personas poseen la misma riqueza que la mitad de la población mundial", afirma en su informe, que se puede consultar en el enlace https://www.oxfam.org/es/sala-de-prensa/notas-de-prensa/2016-01-18/62-personas-poseen-la-misma-riqueza-que-la-mitad-de-la
En el se confirma que "La predicción que Oxfam realizó antes de la reunión de Davos del año pasado, de que en poco tiempo el 1% poseería más riqueza que el resto de la población mundial, se ha cumplido en 2015, un año antes de lo esperado.", dándoles la razón a los indignados, muchos de los cuales son empresarios, campesinos y clase media, no solamente obreros adoctrinados en la fe comunista inspirada en los políticos materialistas que nos desprecian y suplantan pero nada resuelven, como lo muestran los limitados logros de las sociedades piramidales proletarias que reemplazaron las burguesas, sepultureras éstas, a su vez, de las feudales.
Es que lo que cambia en las revoluciones de la Historia son las formas, no la explotación de las mayorías alienadas por unas élites dotadas de su propia dogmática, adecuada al nivel de ignorancia imperante.
Así se ejerce el oculto pero absorbente, contundente y real poder de la plutocracia reunida alrededor del capital financiero de los Rothschild, quienes tan generosamente acogieron al judío y revolucionario Carlos Marx en Inglaterra, lo cual mereció que el genio enfatizara la explotación del hombre por el hombre en los capitalistas fundadores de empresas -como el buenazo de Federico Engels, también judío, que funge de mecenas del respetado intelectual.
Quizás su propósito oculto y magistral era evitar que la verdad cause escándalos como los que provocaría, al destacar el papel de las transnacionales, incluyendo las financieras, otro notable judío revolucionario, conocido como Vladimir Lenin, con su libro " El Imperialismo, fase superior del Capitalismo".
Con tan refinadas argucias han pasado casi desapercibidos en la máquina de opresión social típica de la Historia, y no sólo en la burguesa, los banqueros que subyugan la economía real gracias a su monopolio del dinero, de modo que tienen una mayor culpa en los oprobios del sistema que tanto poder les ha otorgado a los sicópatas usureros, hasta el punto de que hoy son los dueños del Mundo, y lo están matando.
Esta realidad desmiente o, al menos, deteriora los dogmas de los llamados marxistas.
Estos son unos idealistas ateos que han convertido en palabras sagradas los lúcidos análisis del maestro renano, de modo que -sin mayores consideraciones, gracias al dogma de la dictadura del proletariado que se ingenió el poeta Enrique Heine y que Lenin intentó realizar en la Rusia ex zarista- han de estsblecer la clase social a la que pertenece el individuo, pues sería el hilo conductor de los intelectuales orgánicos o cuadros dirigentes del partido "comunista" y sus variantes, para saber si es revolucionario o reaccionario, independientemente de lo que realmente sea.
Ante una ofensiva prácticamente sin máscaras de las desacreditadas oligarquías de todo pelambre que someten y engañan a las mayorías en el mundo entero, quizás para empezar a derrotarlos definitivamente sirva la idea de que: "Las accciones concertadas a través de Internet permiten coordinar una huelga general mundial que los genocidas despiadados no puedan reprimir".
Es lo que se plantea en el punto 7 del ensayo "EL TRASEGAR HUMANO", que transcribo a continuación del publicado en el sitio web "UN CAFÉ CON ANGIOLILLO", en junio 22 de 2011 en el enlace http://www.uncafeconangiolillo.com/2011/06/opinion-dario-botero-perez.html